Se nos va un julio frenético a los amantes de los festivales en Galicia y empieza agosto con el Sol calentando la Península del Morrazo, allí en pleno paraíso atlántico se encuentra la localidad pontevedresa de Bueu, un lugar de obligada visita por sus playas, su gastronomía y del 3 al 5 de agosto por el SonRías Baixas.
Durante tres días casi 23.000 personas (record histórico del festival) disfrutaron de los 23 artistas de gran nivel llegados de toda la geografía española así como de la climatología, los Djs, la propuesta gastronómica y los juegos propuestos por las diferentes marcas comerciales en el recinto del festival.
El jueves 3 de agosto fue el día elegido para empezar el XX aniversario del festival y tras abrir las puertas a las 19.30 h y endulzarnos los oídos a ritmo del Dj durante una hora nos dirigimos al primer concierto: 30s40s50s unos “Grandes” desconocidos para la mayoría del público general pero una superbanda en toda regla de la que vamos a oír mucho a partir de ahora, conformada por Bely Basarte, David Otero (El Pescao) y Tato Latorre (superproductor musical) dejaron claro desde el primer riff de guitarra que la preciosa voz de Basarte iba a tener que competir contra las cuerdas y que esta nueva aventura iba de rock. Tras la divertida intro en la pantalla gigante comenzaron con “Demo”, “Loquenoestáescrito” y tras terminar el tercer tema “Incontrolable” la poca gente presente a esas horas en el festival ya había decidido que era obligado ir a verlos, “Bandeja de plata”, “Tanagrio” y “Conmigoestásmejor” y el primer cover de la noche “Zapatillas” (la especialidad de Bely y todo un guiño de David a su exbanda: El Canto del Loco), “Nazca”, “Una historia normal”, “PQNSC” y “Masallá” continuaron la fiesta mientras Bely comentaba que el nombre del grupo se pronuncia certisfortisfiftis, que aludía a la edad de los integrantes y que todos los temas eran de su primer álbum “Piloto” al que pusieron ese nombre porque creyeron que nunca iba a salir, tras esto el segundo y último cover “It´s my party” para un fin de fiesta frenético con su primer single “Nononono” y “s.XX”.
Cambio rápido de escenario para la segunda propuesta de la noche, Samuraï, una artista madrileña de 23 años y de nombre Aroa a la que desde muchos medios se considera la nueva musa del indie-rock, su estilo pop-punky, su chorro de voz y la fuerza en el escenario quedaron palpables desde “Tiro al aire” su primer tema del concierto, ¨El principio de algo” con mención a sus amigos de La la Love You, “Tirando balas”, “De charco en charco” y “Entre tejados” no le faltaron a sus fieles terminando el concierto llenos de “Adrenalina” e inmersos en una auténtica Rave.
Vuelta al escenario principal para ver a unos Boikot que vinieron a darlo todo, quien los haya visto en directo sabe que nunca defraudan pero tras los tres primeros temas “Jarama”, “Inés” y “Naita” ya todos los presentes eramos conscientes de que esa noche de agosto los Boikot estaban de duende, “Sin tiempo”, explosión de confeti en “Bubamara” y “Salgo a la calle”, no había pausa y alguna voz empezaba a quebrarse con “Lloraré”; “De espaldas”, “Alma Guerrera”, “Bajo el suelo”, “Mentiras” y “Skalasnikov”, una mirada hacia atrás para comprender que ya eramos muchos los presentes, una nube de humo se levantaba en la noche y las gargantas lo daban todo en el medley de “camisa” y “Bella Ciao”, “Korsakov” y dos pases seguidos de “Kualkier día”, el segundo con un Gabri de Dakidarría al que se le hizo una encerrona para que acabara coreando este himno en el escenario, todos necesitábamos una pausa y las pandereiteiras de la casa saltaron al escenario para deleitar a los presentes con nuestras raices más populares, vuelta de Boikot al escenario y suenan “Titanic”, “Grito en alto” y un fin de fiesta con el escenario repleto de artistas e invitados y con todo el personal en el festival presente recordando que “Hablarán las calles”. Épico.
Turno de Santa Salut, la rapera de Sabadell que viene revolucionando el panorama urbano en los últimos años y que le ha llevado a girar por sitios tan dispares como Argentina o Grecia este mismo año, no defraudó a nadie y no faltaron temazos como “Bala Perdida” , “Alzypher” o “90 retro” pero a todos nos quedó la duda de lo grande que hubiera sido su actuación si hubiera sido el viernes donde el reclamo de Natos y Waor trajo al festival un público más joven y próximo a su estilo musical que el reclamado por Boikot o Lendakaris.
Rozando la una de la madrugada los Lendakaris Muertos saltaron “Drogopropulsados” al escenario, Aitor no paro de subir y bajar del escenario (no sabemos como aguantan esas rodillas), le dió su buena ración de saliva al guapo del público e incluso revivió a un pobre Panda; Potxeta como siempre atronador desde la batería; Jokin se tiró y cantó desde el suelo, se puso el pasamontañas y fue fiel a su show particular e Iván siguió dándole esa frescura que desde su incorporación a la banda se percibe en el escenario y sabiendo continuar el testigo cedido por Joxemi tras su marcha a la gira de Ska-P. No faltó ninguna: “Centro Comercial”, “El 4K se llevó a mi chica”, “Eta, deja alguna discoteca”, “Coctel Molotov al chivato del balcón”, “Detector de Gilipolleces”, “Húngara chúngara” , “Modo Dios” y así una treintena de temas ya del cancionero popular con “Oso Panda” de final de fiesta para una oleada de fanáticos que tuvieron lo que fueron a ver y que vibraron con ellos desde el primer momento.
Le tocó cerrar la noche a ETS (En Tol Sarmiento), posiblemente el más conocido grupo en lengua vasca en la actualidad y que dejó claro que su ska y ritmo alegre es propuesta válida en cualquier festival nacional y que pese a la barrera del idioma deberían de ser fijos en la mayoría de festivales nacionales, una pena que les tocara cerrar la jornada cuando ya parte del público exhausto y afrontando una jornada laboral del viernes había decidido abandonar las instalaciones.
La jornada del viernes abrió sus puertas bajo un sol de justicia y fué una joven catalana de raices granadinas nacida en Santa Coloma de Gramanet la encargada de abrir la jornada. Queralt Lahoz recompensó a todos los presentes por el esfuerzo de mantenerse bajo el Sol con un chorro de voz donde las coplas, el flamenco, los boleros y el rap se fusionaban en perfecta armonía logrando una fusión de electrónica y sonidos tradicionales, justificando los premios otorgados por la Unión Europea este año a Queralt, no faltaron “De la cueva a los olivos” una de nuestras preferidas, “Valor”, “Ya no” o “El Tiroteo” y nos fuimos con ganas de verla a una hora más central y con más público.
Cambio de escenario donde una vieja maleta de cuero ya cansada de tanto trotar por todo el territorio nacional presentaba a La Ganga Calé, tras los nombres de Kunque (Juan José Carvajal), Fer, Hugo Martín, Varo V, David Strike, Rubén Berraquero y Raúl Andrade se esconden grandes músicos con muchas giras acompañando a Muchachito, Luz Casal, Vetusta Morla, Estopa, M-Clan, Peret o Leiva. Tras la intro de Cayena empezaron con “Labios de Gelatina”, “El Astronauta”, “Muerto vivo” una intro de piano para presentar “Veneno de libélula”, “Besos de medio lao”, unos acordes del Padrino para “Verdes verdes” y seguimos con “La vecina”, “El capitán” y “Bacalao”, guiños a Beyoncé en “Elefantes suicidas”, a Rocky en “Como una fiera” y turno de las presentaciones con más de la mitad del grupo en medio del respetable y como no dentro de un circle pit, “La receta”, la rumba a tope en “Sigue buscando” y fin de fiesta a lo grande tras “Mañana ya veremos”. Conciertazo !!
Vuelta al escenario principal donde estaba sin lugar a dudas el plato fuerte de la noche, Natos y Waor (Gonzalo Cidre y Fernando Hisado) tras aparcar a un lado Hijos de la Ruina llegaban con su "Quemando Carretera Tour", proyecto en solitario cargado de rap, pero dejando también paso al rock, a las baladas, al rock & blues, al reggaetón, el techno y una amalgama de estilos que en ningún momento olvida la calle y el lado oscuro (el estilo Natos y Waor marca de la casa). Dos cámaras a ambos lados del escenario para captarlo todo y reproducirlo en la pantalla gigante central. Protagonismo central para Dj Saik protegiéndoles las espaldas, juegos de luces milimetrados, humo y como no fuego, mucho fuego, una mirada al público para comprobar que el ambiente del festival era totalmente diferente a la jornada anterior, el ambiente punk y rockero daba relevo a las nuevas tribus urbanas que empezaban a saltar en la intro mientras “Rumba” inauguraba el concierto de la misma manera que inauguró “Luna Llena” (su úlimo trabajo), “Elegante”, “Gloria”, “Hasta que salga el Sol”, “Generación perdida”, “Rcknrollas”, “Septiembre”, “Nosotros” y somatización total mientras nos secábamos la piel en “Sudores fríos”. Un paso más adelante entre la multitud “Dispuestos a morir” aunque no fuera “Martes y 13” y “Gold Diggers”, “Interludio” y “Piratas”, habíamos apenas pestañeado y ya estábamos en mitad del concierto, referencia de Natos a su reciente operación y sus puntos de sutura y que era o descansar o darlo todo y que aquí estaba (dándolo todo). Tiempo para 14 temas más (“Hustlers”, “Carretera”, “UGK”, “Por ti” ….) y final épico con “Cicatrices” (el tema que le daba nombre a su séptimo álbum) y la cuasi techno “Es como la cocaína”, una de esas canciones que hace que te vayas a Spotify tan pronto sales del concierto. Justificaron el porque eran los cabezas de cartel de esta edición.
Cambio al segundo escenario donde Lia Kali supo retener a gran parte del público concentrado por Natos y Waor. La barcelonesa que nada entre el jazz, el soul, el regggae y por supuesto el rap, es una de las voces urbanas más solicitadas del momento y presentó su último trabajo “Contra todo pronóstico” editado este mismo año. En el SonRias pudimos deleitarnos con “Volvernos a amar” (producida por Nanpa Básico a quién pudimos ver semanas atrás en PortAmérica), “El Blues del condenado” y “Me hace mal” entre otras muchas pero también recuperó temás de su anterior etapa en Sibil.La 3 como “Rosas y pistolas”. Al igual que el día anterior con Santa Salut (¡¡ Qué bien le hubiera sentado esta jornada !!) nos fuimos del concierto comentando en las buenas manos que está la representación femenina actual del rap y la música urbana en España.
Regreso al escenario principal donde lxs madrileñxs Tremenda Jauría presentaban su nuevo LP “Todxs Igual”. Quienes lo conocíamos sabíamos de la fuerza de sus directos y que su electrocumbia desde la incorporación de Saray a la batería no estaba exenta de rock y punk y nos esperábamos un trallazo total que solo se consiguió a medias, el principio del concierto fue un poco frío pese a comenzar con “Cayena” y la presentación de los nuevos temas no ayudó mucho, sonaban bien, su mensaje feminista seguía presente, pero el público no acababa de conectar al cien por cien y la subida de alguna espontánea a bailar con ellos no ayudaba mucho, por fortuna poco a poco se fue recuperando el clima que caracteriza sus conciertos y la actuación terminó en una auténtica fiesta donde no faltaron clásicos como “Akelarre” o “Esta noche”.
Turno de las Cool Nenas (Dani, María y Kim) que salieron enfundadas en ropa deportiva vintage de la marca Adidas (¿Patrocinio a la vista?) cada una con un color distintivo (rojo, verde y azul) y un cosplay de inicio espectacular de las míticas Supernenas, tras esta maravilla de performance reivindicaron el derecho a la fiesta, al baile y dieron un auténtico curso de Djs, en sus turnos cada una dotaba a la actuación de su propia personalidad y la música fluía mientras la gente miraba embobada sus bailes desprovistos de pantallas, cañones de humo, fuego…, ellas solas se bastaban para retener al público y hacerlo saltar y bailar. Repetían de la edición del año pasado, jugaban en terreno conocido y si quedaba alguna duda el sábado (al día siguiente) se confirmó que son una de las marcas de la casa.
Y fin de jornada en el escenario principal donde la banda catalana Muyayo Rif fiel a su estilo tocó todos los estilos y así desfiló el punk-rock, el ska, la música latina, el heavy metal, el pop, la rumba, el jazz, el funk… Son un grupo de directo donde su puesta en escena no se puede comparar con la preparación previa en casa de sus temas, la descarga es tremenda y todo suena en su sitio pese a los continuos saltos y bailes, nadie destaca ya que es la conjunción del grupo la que les hace conectar con el público, un público que por desgracia a las 02:40 de la noche (hora de comienzo) ya no era tan numeroso como la banda se merecía pues muchos ya habían decido guardar fuerzas para el supersábado que se avecinaba.
Y como todo lo que empieza tiene que acabar, casi sin darnos cuenta llegó el último día del festival y lo hizo a la gallega con una sesión vermú en la que no podía faltar el “Licorcafé” y de tan preciado manjar nadie sabe más que Lamatumbá, los 9 músicos de la banda ourensana que se caracteriza por la mezcla de diferentes estilos (cumbia, reggae, ska , pasodoble, rock, folk,…) y que vuelven este 2023 tras 12 años de parón. Bajo un Sol de justicia consiguieron congregar a una gran cantidad de gente que participó activamente en todos los juegos propuestos por el grupo pese al calor existente, no faltaron sus clásicos como el consabido “Licorcafé” (locura colectiva), “Dolores” o “Reggae dos mariñeiros” e incluso hicieron algún guiño a sus años de parón con su nuevo single "Xa nos tardaba!" La comunión con el público fue expresada por el grupo al sentarse a tocar en el borde del escenario queriendo mostrar ellos también esa cercanía que sentían.
Segundo y último concierto de la mañana para Ortiga y Pili Pampín un dúo inesperado si no fuera por la capacidad camaleónica de Chicho para participar en colaboraciones y crear nuevas fórmulas (Boyanka Kostova, Los Rastreadores…), en un espectáculo perfectamente coreografiado: dos estilos tan diferentes como los ritmos urbanos de Chicho y la música tradicional de Pili casan perfectamente al coincidir ambos en el término “verbena”, una verbena en sesión vermú la que vivimos y en la que no paramos de cantar todos los presentes temas como “A Santiago vou”, “O galo”, “Como yo te amo” o “Eu chorar chorei”. Cierre del festival hasta la tarde y sensación de que esto de la sesión vermú es una muy buena idea y que gusta mucho ver a los artistas bajo la luz del Sol con un público mucho más “consciente” de lo que está disfrutando.
Tras la parada en la que pudimos pegarnos un bañito en las paradisíacas playas de Bueu para quitarnos el sudor y disfrutar de la gastronomía local regresamos a las 19 h para ver la actuación de LaMontagne & PicoAmperio, lo allí vivido es difícil de describir, el escenario completamente vacío mientras montones de gente buscaban las sombras lejanas y las barras para soportar el tremendo calor mientras la hipnótica voz de Laura nos relajaba deseando haberla oído mientras estábamos en la toalla un par de horas antes. Decir que PicoAmperio en su función de Dj sabe también en todo momento ser el guardaespaldas perfecto de una voz tan personal e íntima. No faltaron temas como “Porque no mundo” , “Ondas do mar de Vigo” o “Banharémonos nas ondas” todas ellas incluidas en su álbum “Algo que sinalar”.
Cambio de escenario para ver a uno de esos grupos que te justifica la compra de la entrada para un festival por sí solos como son Arde Bogotá. Los cartageneros están en lo mas alto del rock alternativo de nuestro país y sus conciertos son una descarga de adrenalina y una oda a las cosas bien hechas, “Los perros” uno de sus temas más duros abrió el concierto y puso ya de salida las cartas sobre la mesa, “Abajo” fue aprovechada por Dani Sánchez para captar los objetivos de los fotógrafos en sus riffs y paso a “El beso” momento en el que puedes apreciar que Jota Mercader y Pepe Esteban marcan desde la batería y el bajo un ritmo que es cualquier cosa menos sencillo. Parón de fuerza y salto al pop bailable para buscar la complicidad del público en “Que vida tan dura” y “La Salvación” mientras Antonio García explica sus temas y significados y su lugar en “Cowboys de la A3” su último trabajo y que sirve de columna vertebral al concierto. “Virtud y castigo” (ojo a su coreo final) , “Exoplaneta” (himno oficial de su ciudad de origen) y “Antiaéreo” para tener ya claro que la voz de Antonio es un privilegio y que con la ayuda de Pedro Quesada consiguen una unión muy difícil de ver en directo y menos en grupos con menos de un lustro de formación y eso se traduce en una comunión total con el público. Fin de concierto épico con “Cariño” con una traca final de Rock & Roll y vistazo rápido al móvil buscando la fecha y lugar más cercano para volver a verlos
Sin tiempo para asimilar lo que acabábamos de ver y oir nos dirigimos a ver a Grande Amore el alter ego de Nuno Pico (la voz más aguda del techno-rock gallego) que logró una simbiosis con su público muy difícil de ver, Nuno se muestra natural en el escenario con sus vaqueros clásicos, sus zapatillas deportivas y una forma de ser que te hace creer que eres amigo suyo desde hace mucho tiempo, que llevas jugando con él en la calle desde hace un montón de tiempo y que juntos tenéis una pandilla con la que ese día estáis de juerga una vez más. Los temas de su álbum “25” (la encargada de abrir el concierto), “Esa pena que a veces teño”, “Non sei cantar”…., se fueron sucediendo mientras lanzaba dardos mortales para captarnos a los que estábamos más entrados en años como ese magnífico cover de “Maldita sea mi suerte “ de sus / nuestros admirados Suaves. Mención especial al sonido desde las mezclas de MariaGrep (componente de Cool Nenas) y Clara Redondo que le dan ese toque tan personal y único y que no pararon de bailar y derrochar buen rollo en todo momento.
Turno para la Pegatina en el escenario principal. El grupo de mestizaje festivo de Barcelona que se encuentra dentro de su gira 20 aniversario es sin lugar a dudas una de nuestras bandas más internacionales con conciertos en más de 35 paises y ya con más de 10 discos a sus espaldas.
El concierto comenzó, como nos tienen acostumbrados, con una breve intro muy intensa donde volaron los confetis y serpentinas que se quedaron alojadas en gran parte, en el techo del escenario dándole un toque muy vistoso a su actuación, desde este momento 20 grande éxitos (otra vez el 20) se sucedieron a un ritmo frenético. Todo al ritmo de unas coreografías perfectamente ejecutadas y diseñadas y un juego constante con la videopantalla gigante frontal que acompañaba con un exquisito gusto a la temática de cada canción.
El sonido fue perfecto en todo momento, dando la potencia necesaria y sin pasarse en ningún momento y es algo en lo que los conciertos de la Pegatina han mejorado mucho en los últimos años, el juego de luces y el atrezo del escenario como una vieja farola en el escenario bajo la que se amparaba Romain Renard al acordeon nos acababan de demostrar que estábamos ante una producción musical detrás de la cual había mucho trabajo. “Y volar”, “Yo quiero bailar”, “Miranda”, “La voisine”, “Como se hacen las flores”, “Mamá”, “Como explicarte” y “Olivia” se sucedieron dejando claro que son un grupo de directo, que sus discos son buenos, es innegable, pero que es en vivo y ante el público donde se encuentran en su salsa, son grandes músicos y los grandes músicos prefieren el directo a los estudios. Y turno de “Ahora o nunca” donde Macaco salió a colaborar al escenario dándonos un pequeño spoiler de lo que íbamos a vivir en apenas un par de horas, “La Guspira”, “Gat Rumberu”, “Y se fue”. Parón para poner un QR gigante en la pantalla prometiéndonos descuentos en sus conciertos especiales 20 aniversario y cientos de pantallas capturándolo. “Heridas de guerra” y ”Mamma mía” tras la cual llegaron las consabidas presentaciones del grupo en las que Rubén concentró gran cantidad de los aplausos al jugar en casa,”No som d´aqui” para abandonar el escenario y no regresar hasta que el público se hartó de corear el ya clásico: “No estamos todos, falta Maricarmen”, tras la vuelta del grupo un pequeño variadito por si alguien echaba de menos algo, ya estábamos todos llegó “Maricarmen” y un pronóstico muy fácil de cumplir en nuestras queridas tierras gallegas “Lloverá y yo veré”. Final apoteósico de un concierto en el que solo (por pedir algo) nos faltó escuchar a Rubén cantar en gallego. ¡ Enhorabuena Adriá, Rubén, Ovidi, Ferrán, Axel, Romain, Sergi, Miki y Miguelón por el espectáculo brindado !
Mientras los organizadores del festival se frotaban las manos ante la avalancha de gente que acudía a las barras a refrescarse tras tanto derroche de adrenalina muchos decidimos ir al segundo escenario a ver a María de Juan, artista granadina nacida en Valencia y de raices familiares ligadas siempre al mundo de la música . Vestida en un traje flamenco rojo de corte moderno demostró ya desde los inicios de su show que los años de estudio de bachillerato musical en Londres y su paso por la Rockschool Academy fueron muy bien aprovechados y sin darnos cuenta nos vimos inmersos dentro de lo que se puede describir como una rave coplera que gira en torno a una mesa presente en el escenario bajo un ambiente teatral en el que la copla cual ave fénix vuelve a nacer desde las cenizas electrónicas generadas por tres jóvenes y grandes músicos como son Alejandro Solano, Cristina Sánchez y el divertido Juanito Rubio que flanquearon a María en el escenario. No nos faltaron “Que poderío tendrá” o “Vestida de encaje” y quedó claro que el show giraba en torno a “Dramática” su último álbum y que rompía en lo visto con “24/7”.
Vuelta al escenario principal donde Macaco (el alter ego de Dani Carbonell) dió una lección de virtuisismo y buenrollismo y defensa del medio ambiente en su mezcla electrocallejera de rumba, reggae, sonidos africanos y funk. Apenas le hicieron falta una decena de temas para conquistar a todos los presentes “Moving / Volar”, “Quiéreme bien / Love “, “Valientes", “Lo quiero todo”, “Tengo” son himnos que el público coreó y que en la mayoría de los casos ya son parte del folclore nacional pese a incluir también temas de “Vuélame el corazón” (su último trabajo). Dani sabe hacerse acompañar muy bien y su banda está compuesta de músicos internacionales y sus dos guitarristas tan pronto se deslizaban por el escenario mientras solltaban un riff como se marcaban la madre de todas las rumbas, mientras desde la batería y los teclados se creaba un ritmo alrededor del que fluía la banda y la exquisita voz de tenor de nuestro Macaco preferido que no dudaba incluso en hacer improvisaciones vocales o atreverse con el beat box imitado la trompeta de Louis Armstrong. Tras dejar a todo el público con “La mano levantá” y “Bailar las penas” se acabo una actuación mientras nos frotábamos los ojos sin acabarnos de creer el increible día que estábamos a vivir. Solo un pequeño pero: la molesta iluminación de luces rojas y azules que impidió a los fotógrafos realizar un trabajo de calidad y capturar los momentos como un artista de este nivel se merece.
Y llegó el pequeño defraude de la noche, tras el concierto de Macaco se anunciaba un artista sorpresa y la imaginación en estas situaciones juega malas pasadas y más al comprobar que eran Cool Nenas las escogidas, no por la calidad de las chicas y de las que hablamos mucho y bien líneas atrás sino por el hecho de repetir artista cuando nuestras fantasías iban mucho más allá. De todas maneras es justo decir que volvieron a estar sublimes y justificaron el porque el festival confía tanto en ellas.
Gran concierto final de la noche para los Dubioza Kolektiv, nuestra banda bosnia preferida y multiestilo de ska, rock, folklore bosnio, dub , hip-hop, hard-rock y todo lo que se os pueda ocurrir que exprimieron las últimas fuerzas a un personal que volvía a llenar el escenario grande. Las voces de Almir y Adis son dos metralletas perfectamente sincronizadas que siguen el ritmo otorgado por Senad y Vedran a la batería y el bajo mientras Brano desde la electrónica le da color a las melodías siendo Mario al saxofón el encargado de levantar al público en cada una de sus intervenciones con mención especial a Jernej que desde su ircorporación al grupo en 2015 le ha ido dando al grupo en cada actuación un toque más hardrock.
Sonaron la mítica “Kazu”, “No Escape” y “Free.mp3”, invitaron a Adriá de La Pegatina a cantar “Hay Libertad”, sus letras cargadas de mensaje social y político incluso pidieron una oportunidad para su país en Eurovisión con “Euro Song” (asegurando el primer puesto en 2025), sacaron a un robot al escenario a bailar y cantar en “Take my job away” y guiño al personal con los Jinetes del Trópico en el escenario cerrando la noche como había empezado el día con una oda a ese brebaje tan nuestro llamado “Licorcafé”. No faltaron los carteles tan famosos de la banda, su uniforme futbol-beisbolero con los colores amarillo y negro característicos, los juegos con el público y sus divertidas coreografías y solo echamos de menos a su famosa bailarina y sus danzas del vientre a la que tan mal nos tenían acostumbrados. Como siempre excelentes.
Y fin de fiesta y despedida hasta el año que viene con Ninhodelosrecaos DJ a la mesa de mezclas, identidad bajo la que se esconde la figura de Rubén Sierra (guitarrista y cantante de La Pegatina), su sonido como miembro de la Pegatina no puede ser más ecléctico y el mombathon, el trap, la salsa yel tropical bass entre otros se combinan para alegría de quienes dieron resistido hasta el final de fiesta de un día como este.
