Tras recoger nuestras acreditaciones y entrar bajo los primeros compases nos dirigimos a ver a Fillas de Cassandra, el Mercado Gandeiro de Chantada nos daba techo y pegado a el se encontraba el escenario mientras que por una mínima fisura entre las dos construcciones se colaba una cascada de agua que daría mucho juego a nuestros fotógrafos y videos y no nos abandonaría durante todo el festival, el dueto vigués compuesto por Sara Faro y MaríaSoa que ya congregaban a gran cantidad de gente que coreaba sus canciones volvió a dar muestras de solvencia en el escenario y que no son grupo de una sola canción, por supuesto que “Varre Vasoira” (Lisístrata) sonó, pero a éxitos también sonaron temas como “Tataravoa” (muy coreado por el público), “Punheta” o “Eco” sin desmerecer al resto de temas de su repertorio, pero es que estos temas suenan muy bien en directo. Muy aplaudidas las viguesas en su actuación.
Tras terminar la asociación feminista Polamiuda salió al escenario a recordar en un manifiesto cosas que ya todos deberíamos saber en pleno siglo XXI. Se encargarían del Punto Lila durante todo el festival.
Turno para Dj Saya durante el cambio de escenario (lo que sería una constante en el festival) y uno de los platos fuertes de la primera jornada, Narco. La mítica banda de rap metal sevillana llegaba a Galicia sin el mítico Vikingo a la voz y todas la miradas estaban puestas en un Rey Ezequiel que desde el primer acorde en “P.A.M !” disipó todas las dudas que pudiera haber en el ambiente, “Mosqueao, primo estoy mosqueao, si te quedas es porque estás mosqueao” y vaya si estábamos mosqueaos que de allí no se movió nadie, un conciertazo en toda regla y que al entender de quién os escribe fue el mejor concierto del festival (y ojo, el nivel fue muy alto), clásicos como “Ahí Fuera” , “La Hermandad de los Muertos” (con Rey Ezequiel vestido de cofrade) o “Chispazo” hermanaron perfectamente con los nuevos temas de “Parásitos” (su último trabajo), Distorsión Morales es el de siempre y no falla, Diablero Díaz corta con la guitarra, Caraperro y Amnésico marcan el ritmo desde batería y bajo, El abogado del diablo desde el DJ encuentra en esta nueva etapa un refuerzo enorme con El Tragabuche en el teclado, el sonido perfecto en un recinto en el que era muy fácil pasarse de sonido.
Tres fueron los minutos que tardaron en ponerse de acuerdo por Whatssap los miembros de La Quinkillada para aceptar la invitación express que les brindaba la organización para sustituir a unos Tremenda Jauría que “no podía llegar por motivos logísticos” cosa que si hicieron los de Bueu y que a pesar de estar ensayando los temas del próximo disco y no contar con esta actuación salieron muy bien parados del escenario con un público entregado a su rumba verbenera gallega, no hubo tiempo para preparar y presentar los nuevos temas pero con los sencillos de Gozar, Sentir, Bailar les bastó para menear a todo el personal
Rozando la una de la madrugada la banda de rap barcelonesa Lágrimas de Sangre salía a darle calor a una noche en la que el público empezaba a apretarse para sentir el calor humano, para quién no los conozca, decir que llevan 17 años en esto de la música y eso se nota y mucho en el directo con unas voces claras y bien armonizadas de Neidos, Still y Microbio, con un Ramón Anglada con su guitarra eléctrica blanca que también tiene sus momentos para jugar con el público y lucirse en el show y un solvente Acid Lemon desde el Dj que sonaba realmente bien, muy coreados por el público sonaron clásicos como “Volver” , “La gente” o “Voy a celebrarlo” y una sensación de sello diferencial con respecto a otras bandas al hacer una propuesta de rap más próxima al pop-rock que a los tópicos clásicos de calle/barrio, gangsta y drogas.
Momento emotivo de la noche para la actuación de Rastreros, emotivo porque tocaban en casa y emotivo porque ellos estaban también en la primera edición del festival, su aparición en el 89 daba los cimientos al movimiento bravú al que se anexionaban figuras como los Diplomáticos de Montealto, Resentidos y sin el que hoy no entenderíamos a clásicos de nuestra tierra como Heredeiros Da Crus, sin Rastreros y sin Chantada no estaríamos hablando de esto y Eléctrico – su incombustible voz- salió con su tutú rosa de gala, su camiseta del grupo ensangrentada y su pelado rostro decorado como Samaín lo requería (la calva ensangrentada como es menester y el rostro una calavera), sonaron a himnos cada uno de los temas que tocaron que pecho en mano sus paisanos coreaban cual final del mundial, mención especial a esa gaita presente en el grupo pese a los numerosos cambios en la formación desde la llegada de Óscar en los lejanos años 90, que les da ese toque de la tierra y que hoy echamos de menos en grupos de tierras hermanas como Desakato. Nos fuimos con ganas de volver a verlos pero tocará esperar a la 34ª gira.
Y fin de primera jornada para un Grande Amore que está de dulce, la banda de Nuno Pico, que salió al escenario con la camiseta del equipo de futbol local desatando la locura de los presentes, con un segundo trabajo ya a sus espaldas tan pronto tiene a los míticos Suede de teloneros como se atreve a versionar a Los Suaves en el mismo recinto donde los Ourensanos grabaron su mítico directo y especializado como está en cerrar y retener a la gente en los festivales (PortAmérica, Ouren Sound, Castañazo….) es una apuesta segura para los organizadores de eventos y además de la voz aguda de Nuno (difícil de escuchar de primeras) y su indudable carisma, los sintetizadores tan cargados de graves y que chocan con la voz, las cajas de ritmos y las guitarras de Clara Redondo y mariagrep hacen de la propuesta algo irrechazable que nos hizo a todos los presentes ir muy tarde a la cama pese al frío y al temporal y eso que a nosotros nos tocaba ir a dormir a Ourense.
El tiempo desapacible y la larga noche anterior nos desanimaron a acudir a Los Cantos de Taberna tan sello propio del Castañazo pero bastaron unas preguntas a los presentes para tener constancia de que otra vez habían sido un éxito y otra vez más se habían llenado los bares de Chantada.
Tras entrar y coger unas calentitas y recién asadas castañas cortesía de la organización, nos dirigimos a la actuación de Dakidarría, que otra vez volvió a ser épica, no faltaron los solos de Iñaki, las muecas y posturitas de Torroncho, los reggaes de Pol, la pirotecnia y las banderas piratas, la navegación de Paula sobre el público y…. tantas cosas que solo esperamos que ese documental que están grabando con tanto mimo los de Val Miñor refleje (aunque solo sea en parte) lo que sentimos al verles sobre el escenario.
Desde Valencia llegaban Mafalda, grupo que destaca por sus letras de gran carga de protesta social y un sonido que mezcla ska, funk, hardcore de una manera tan característica que han llegado a tener un sonido propio, su puesta en escena teatral con pinturas faciales marca de la casa incluidas, sus juegos de luces y su fuerza es innegable pero el hecho de que se pasaran de sonido (por lo menos en la parte delantera que era donde nos encontrábamos) deslució gran parte del buen trabajo en las voces de Vera, Marcos y Bárbara a los que costaba entenderlos y nos quedamos con ganas de verlos al aire libre o con un sonido más acorde porque si nos hicieron saltar y gozar así que tiene que ser tremendo cuando todo esté bien afinado.
Y turno para Tropa do Carallo, la base de la última formación de La Polla Records: El mítico Evaristo Paramos, su inseparable Tripi a la batería, Abel Murua al bajo y Alberto Salgado a la guitarra. 27 fueron los temas que descargaron los de Euskal Herría sin pausa, sonando más a Rock & Roll que a punk y con una carga de denuncia social marca de la casa, el sonido limpio, perfecto y la voz de Evaristo más contenida que en formaciones anteriores pero que casa perfectamente con el sonido de la Tropa, aclarar que Evaristo no solo es voz, es magnetismo que te atrapa y acapara tu mirada a sus gestos que adornan los temas que va recitando cual juglar moderno. Especialmente aplaudidas “Fora da Terra” y “Ceibe” cantadas en el idioma de casa, la anécdota al final del concierto cuando un chavalín aún en edad de primaria se marcó unos coros de lujo en el escenario dejando claro que cuando Evaristo lo deje hay relevo y sigue habiendo esperanza.
Cuando la fusión de la banda de rap Sons of Aguirre y la banda de metal melódico Scila se anunciaron para el Castañazo muchos corrieron a reservar su entrada, por separado ya son buenos, juntos uno de los mejores espectáculos en directo que se puede ver en este país con capacidad para llenar salas o acaparar la atención y congregar a miles de personas en festivales de la talla del Viña Rock. WillyLET (Día Sexto – David Saiz) y MC Endesa (MasaDemocrata – Victor Barroso) han encontrado la tecla al dotarle de humor a un mensaje que firmarían sus amigos de Los Chikos del Maíz y el acuerdo para la banda sonora con Scila es todo un acierto, una pena que los técnicos de sonido pecaran donde antes pecó Mafalda y el sonido no fuera del todo bueno en parte del recinto, pero pese a ello, nos quedan momentazos como el himno en el que se ha convertido “Cristales Rotos” cantado por todo el respetable de Chantada y protagonismo exclusivo para la tercera voz de Diego Varea (Msías) humorista y cantante que se une a la formación para hacerlos más grandes.
Tiempo para cambio de escenario con una Mekanika Rolling Band que se coló entre el público para ofrecer todo el buen rollo que la lluvia de la jornada le impidió brindar por la tarde por las calles de Chantada.
Final de fiesta para dos grupazos gallegos, cada uno referente de su género en su tierra, los lugueses Arrhythmia son tal vez la mayor referencia del metal gallego, lo que les ha hecho ganar el Band Contest del Resurrection Fest o el Martin Codax pero es en el directo donde aprecias que aparte de su fuerza y de su metal no está exenta de electrónica, rock & roll clásico e incluso de un rap que se puso todavía más de manifiesto al invitar al escenario en “A forza da razón” a los que a la postre serían los últimos protagonistas de la noche: Rebeliom Do Inframundo.
Los Rebeliom son otro de esos grupos que se están especializando en cerrar festivales, los de Ponteareas están de dulce y la voz inconfundible de Nervo ha encontrado dos grandes acomodos en la compañía vocal de Malvares de Moscoso y Frank, con un Pol desde el Dj que siempre marca el ritmo a seguir, “Amor o Barbarie” su último trabajo marca el camino pero “Ilegal” sigue teniendo gran peso en el directo, su fuerza nos despejó para conducir de vuelta a casa, su pirotecnia en la puesta en escena nos dió calor en la fría noche de Chantada y el momento mágico de Nervo en el escenario con la siempre sensual y mágica WöYzA nos hizo encontrar la Luna entre las nubes negras de la noche mientras “Loitábamos cos demos”.
Al grito de Lume y Rebeliom !! nos fuimos de un festival al que deseamos volver y del que queremos destacar a una organización que ha estado perfecta, moviéndose rápido para sustituir a quien se cayó del cartel, luchando contra el temporal y recolocando todas las piezas en su sitio y dándonos todas las facilidades con un trato exquisito a quienes con nuestros escritos e imágenes tratamos de llevaros a casa parte de lo allí vivido. Una línea que esperamos sepan imitar otros muchos y sea la tónica a seguir. Larga vida al Castañazo !!
Os dejamos la galería fotográfica del evento: