Ya ha terminado el Resurrection Fest 2024 (XIX edición) y es ahora el momento de plasmar en unas líneas las emociones vividas en cuatro días frenéticos en una de las ediciones más controvertidas de los últimos años con los haters inundando las redes sociales ante las ausencias de los cabezas de cartel favoritos de cada uno pero que a nuestro entender resultó ser uno de los Resus más completos donde los escenarios Desert, Chaos y Ritual brillaron casi tanto como los “grandes” del Main.
Tras cruzarnos Galicia de sur a norte y en diagonal decidimos alojarnos en el camping A, un campamento situado al lado de la playa de Covas y muy próximo al emplazamiento original del festival (el campo de fútbol de Celeiro), un camping que como todos los años volvía a ser gratuito pero que como novedad este año necesitó por órdenes del ayuntamiento una retirada de entradas previa lo cual suscitó muchas dudas y comentarios en las redes, vista la controversia fue nuestro lugar elegido y tras cinco días allí comentar que la medida fue acertada, zonas con grandes caminos delimitados, puesto de socorrismo, baños propios, carpa con pequeña cafetería y control para entrar. A la postre todo un acierto y un lujo para un festival de estas características y más aún siendo gratuito en el que solo pedir para futuras ediciones una limpieza de aseos un poco más fluida y una recogida de basura diaria de la zona.
Pero si estás leyendo esto posiblemente lo que más te interese sean los conciertos así que pasamos a ello: JORNADA DEL MIÉRCOLES
Los más madrugadores se acercaron en su mayoría al main pasadas las 2 de la tarde para ver a las chicas de Hanabie y su metal kawaii, cada vez hay más seguidores del metal nipón y eso se notó en la gran cantidad de gente concentrada para una hora tan temprana a la que se unió la actuación posterior de Crystal Lake , los de Tokio visitaban por tercera vez el festival y esta vez volvieron a dar una descarga de adrenalina de ese metalcore tan característico que se mezcla con el “nu” y el “rap” metal pese al proceso de adaptación en el intercambio en las voces del mítico Ryo Kinoshita por John.
Tras la descarga nipona nos decidimos por algo más patrio y nos dirigimos al Chaos para ver a La Inquisición, los barcelonenses tienen un directo brutal y te hacen cantar, saltar y vibrar desde “Stella Maris” (su primer tema) hasta “Rosa de Mort” (final) convirtiendo la carpa en una fiesta punk donde desfilaron clásicos como “Septiembre”, “Falsos profetas” o “Guerra Total”
Paseo previo por el recinto con visita obligada al merch oficial, al boulevard y dos puestos que nos hicieron mucha gracia al tatuarnos con hena en Refix y probar bebida isotónica hecha con agua de mar y hacernos unas fotos divertidas en el puesto de Torres de Núñez. Al terminar decidimos ver el final de los británicos Heriot donde nos sorprendió su vocalista femenina Debbie Gough que le da un sello tan característico que es difícil encuadrarlos en un género musical único, así que los definiremos como “metalcore agnóstico”
Y momento de Vincent Damon Furnier, un cantante mítico de hard rock y heavy metal de 76 años que tomó el nombre de su exbanda para convertirse en el mítico y legendario Alice Cooper y que ha sido referente para artistas y bandas como Marilyn Manson o Rob Zombie, con su visita a Viveiro seguía completando cromos de la historia del metal y su actuación era “algo obligatorio de ver” y por fortuna no defraudó, con una actuación llena de teatralidad donde paparazzis y fans pesadas iban muriendo a manos de Cooper mientras himnos de nuestras vidas como “Poison”, “Under my Wheels”, “Bed of Nails” iban desfilando. Faltaba saber como fingiría su propia muerte y el momento llegó con “I love the dead” donde una guillotina de la que estaría orgullosa la revolución francesa sesgó la cabeza de nuestro protagonista que resurgió de sus cenizas en “Elected” para terminar con la tremenda “School´s Out”. Mención especial para la banda que lo acompaña y que es la que te esperas de una leyenda de esta categoría y en la que sobresale Nita Strauss a la que la revista Guitar World llegó a colocar en el puesto de honor de las mujeres guitarristas que debes conocer y que llega a eclipsar al propio Alice Cooper en muchos momentos del show y atraer nuestras miradas. Con un deseo de “unas pesadillas horrendas” por parte de Cooper nos despedíamos de otro deseo cumplido.
Apenas dos parpadeos para tomar una dolorosa decisión: perderse a “Solence o Speed”, lo decidido fue salomónico y provocó una división del grupo. Los atraídos por la sintonía de Dancing Queen de Abba que introducía en el cercano escenario del ritual la actuación de los suecos Solence disfrutamos de una fiesta pura y dura de rock y metal electrónico que durante 10 temas, un poco menos de los años de experiencia de la banda nos pusieron a bailar y a sonreir a miles de personas con temas como “Blackout”, “Blow Up”, “Animal in me” o la elegida para terminar “Who You Gonna Call”. Los que se decantaron por los australianos Speed se encontraron con una de las mejores muestras de hardcore punk puro que se pueden ver en la actualidad, con una actuación en las que las palabras “amistad” y “energía” brillaron tan fuerte como los cuerpos musculados de gimnasio que exhibieron Jen y Aaron Siow y compañía. Si duda dos bandas dignas de un Main Stage en los próximos años.
Reunificación en el escenario principal para Machine Head, la banda americana de Groove metal liderada por Robert Flynn que llevaba 16 años sin visitar nuestro país y que destrozó nuestras cabezas con una intensidad tremenda desde el “Imperium” inicial al “Halo” final con repaso intermedio a éxitos como “Bulldozer”, “Locust”, “Davidian” mientras que llamas de fuego, martillos y cubos hinchables, columnas de humo, confeti y un juego de luces tremendo acompañaban a la perfección a una actuación que ya vibraba por sí misma. Esperemos verlos pronto de vuelta porque son una banda que nunca puedes rechazar.
Y nos volvimos a dividir (Slayer vs Comeback Kid): Con la mítica actuación de Slayer en el Resurrection 2019 bajo la tormenta en nuestros recuerdos, muchos fuimos los que miramos al amenazador cielo de Viveiro para ver si Kerry King (50% de Slayer) era capaz de repetir la jugada pero aunque Thor no le acompañó en esta ocasión la lluvia de fuego con la que venía acompañado hizo arder Viveiro tanto con versiones como “Disciple” o “Black Magic” de su mítico grupo como con sus temas en solitario, llegando a cerrar con “From Hell i Rise” publicitando así su último álbum.
Mientras tanto los canadiensese Comeback Kid que ya estuvieron en Resurrection 2017 y en la Route del 2018 en la carpa del Chaos conseguían un sonido completamente nítido llegando a ser de los que mejor sonaron en la carpa con su hardcore punk en un espectáculo lleno de fuerza donde representaron los temas más queridos de su repertorio como “Heavy Steps”, “Do Yourself a Favor”, “False Idols Fall”, “Should Know Better”o la mítica para cerrar “Wake the Dead”
Y para finalizar la jornada nos volvimos a repartir entre los que decidieron la tranquilidad y la belleza del folk rock nórdico adornado con una electrónica oscura de la cantautora feroesa e islandesa Eivørvque nos deleitó con temas conocidos por los presentes gracias a videojuegos como God of War o la exitosa serie de Netflix The Last Kingdom, haciendo brotar una magia mística en el Desert Stage.
No se puede culpar a los que se perdieron la maravilla de Eivør pues al mismo tiempo en el escenario principal otro grupo mítico del punk hacía las delicias de miles de personas. La banda canadiense Sum 41 liderada por el carismático Deryck Whibley (Bizzy D) hizo un repaso a sus casi 30 años de carrera destilando un buen rollo que pronto se contagió entre un público que no paró de saltar, cantar y sonreir durante 17 temas y que ni siquiera se enfrió durante el pequeño problema de sonido que se registró tras el solo de batería. Temas como “Motivation” (el que abrió el concierto), “No Reason”, “In Too Deep”, “Fat Lip”o “Summer” son el himno de la vida de mucha gente y nos gustó especialmente el cover punk de “We Will Rock You” de los míticos Queen.
Envueltos en las serpentinas que lanzaron terminamos la jornada primera de un Resu que empezó a lo grande.