El ciclo de conciertos Costa Feira, que hace vibrar las noches veraniegas de Sanxenxo, tuvo un visitante ilustre con más de 45 años de carrera, el icónico Loquillo hizo vibrar el Festival con su única presentación en Galicia de la gira "Transgresiones". El cantante catalán, conocido por su carisma y presencia escénica, ofreció una noche inolvidable llena de poesía y rock and roll.
Transgresiones es un espectáculo diseñado para grandes teatros y Costa Feira tuvo que adaptarse, colocando sillas y diseñando unas zonas que los evocaran y que probablemente les servirá de preparación para sorpresas en futuras ediciones. El escenario, diseñado con plataformas circulares tapizadas color piel y una iluminación que evocaba la atmósfera de Bradway, transmitía elegancia y sobriedad.
Las puertas se abrieron a las 20:00, tiempo suficiente para localizar cada uno su lugar, saludar a los amigos y tomar algo antes de las 22:30, hora en la que con puntualidad británica José María Sanz Beltrán (nuestro querido "Loco") salió a escena acompañado por su banda habitual, con Josu García, Pablo Pérez e Igor Paskual a las guitarras, Laurent Castagnet a la batería y Alfonso Alcalá al bajo, además del cello de Cristina Suey y los teclados de Germán San Martín.
Desde el primer tema "La Vida que yo Veo" Loquillo dejó bien claro que este no iba a ser un concierto habitual y que se iba a centrar solamente en su último trabajo "Transgresiones" (2024) que recopila la poesía cantada llevada a los escenarios por nuestro protagonista desde hace 30 años y en la que en sus propias palabras hace "defensa de la cultura europea y de autores contemporáneos como Bernardo Atxaga, Mario Benedetti, Jacques, Luis Eduardo Aute,…."
Así fueron desfilando canciones como "Transgresiones", "Los gatos lo sabrán", "De tripas corazón" o la maravillosa y conocida "La mala Reputación", siempre llevadas al jazz y al blues aunque sin olvidar el rock clásico y que resonaron con precisión y energía.
Pequeño parón para recargar fuerzas y cinco temas en los bises entre los que destacamos "El hombre de negro", "Rusty" y el momento culminante que llegó con "Voluntad de bien", dedicada a Sabino Méndez, que cerró el concierto con una ovación del público aunque algunos despistados seguían sin entender porque no habían sonado clásicos como "Cadillac solitario", "El ritmo del garaje" o "Carne para Linda".
Al terminar como siempre la “Bulla”, que se extendió casi hasta el amanecer, comenzó con DJ Pidal recordando temas cásicos del rock patrio y que alegraron a los que se encontraron fuera de lugar durante el concierto.
Esta semana finaliza la edición 2024 con las actuaciones de Taburete, Coque Malla, Sidecars y Natos y Waor. Os los váis a perder?