Este 2025 nace Son do Nordés en A Coruña

A Coruña, donde la historia se encuentra con la brisa del Atlántico, ofrece un escenario cultural vibrante. En el corazón de la ciudad, el Parque de Santa Margarita emerge como un oasis verde, hogar de un anfiteatro al aire libre con un encanto especial. Este espacio único, rodeado de naturaleza y que brinda una acústica natural y una atmósfera mágica para disfrutar de la música en vivo acogerá este verano un nuevo festival: Son do Nordés Este ciclo de conciertos en el Parque de Santa Margarita promete ser una cita ineludible, fusionando la riqueza musical con la belleza natural de A Coruña.  La organización del festival no solo ha anunciado el evento sino que acaba de confirmar sus dos primeras actuaciones: Il Divo y Albano & Romina Power. Desde 2004, los progenitores de la ópera crossover se han convertido en un fenómeno impulsado por demostraciones de destreza vocal, conciertos alrededor del mundo y una magia indefinible entre ellos. IL Divo ha vendido más de 30 millones de ...

Travis Birds llena de magia la Sala Capitol con su "Jardín del deseo"

La mítica Sala Capitol (que este año celebra su XX aniversario) colgó el cartel de “entradas agotadas” para recibir a Travis Birds en una de las paradas más esperadas de su Jardín del deseo Tour. Con su voz única, entre lo rasgado y lo etéreo, y un repertorio que equilibra lo íntimo con lo salvaje, la madrileña consiguió que el público santiagués se entregara por completo desde el primer acorde. 


Con la sala a oscuras y una expectación palpable, la gran banda compuesta por Javi Pedreira a la guitarra, Jacob Reguilón al bajo, Mario Carrión a la batería y Tony Molina al trombón salió a escena con una intro que precedió la aparición de una coqueta Travis Birds entre los vítores del público, y que abrió la noche con "Cada minuto", que sonó más orgánica y menos electrónica que la versión de estudio. La introducción pausada y melancólica sirvió de puente perfecto para adentrarnos en su mundo. Su voz, tan particular, envolvía cada palabra con una intensidad casi hipnótica. 

Le siguió la poesía de "Madre Conciencia", donde la instrumentación creció en energía, con un Tony Molina espléndido desde los vientos y un Javi Pedreira acercándose al ska. La sala comenzó a moverse con más libertad. 


Entonces llegó el estilo sesentero y yeyé de "Peligro", y con ella, los primeros compases realmente incendiarios, agudizados por el bajo afilado de Jacob. La mezcla entre la crudeza de la letra y la pegada instrumental encendió la Sala Capitol, preparando el terreno para "Perro deseo", una de las canciones más viscerales de su repertorio y que da título al álbum que está cerrando esta gira. 

El ambiente cambió con "Cuando Satán" vino a verme, una canción que mezcla lo narrativo con lo críptico, donde la artista juega con su voz de manera magistral y la melodía del estribillo se graba en nuestra mente. 


Llegó entonces "Oruga", con su aire íntimo al principio y con una Travis muy dura en su guitarreo (rozando el metal) en la transformación final. Luego vino "Grillos", donde la sencillez de la guitarra y la letra calaron hondo entre los asistentes, transportándonos a todos a un mundo onírico en el que se echaba un poquito de menos al maestro Leiva. 

Y pasamos de insectos a mamíferos con "Coyotes", con Travis a los teclados, el público coreando cada verso y, en la atmósfera, un sentimiento de amor poco humano y cada vez más animal. 


Con "Contigo", la versión del clásico "Stand By Me de Ben E. King" (que Santa Lucía ha llevado en forma de anuncio a nuestra vida), y el bolero acelerado que es "Una romántica", la velada tomó un tono más melódico y nostálgico, permitiendo a la audiencia un respiro emocional antes del siguiente torbellino. 

"Mis aires" para demostrar su destreza teatral y una "Maleza" fuera de su zona de confort, con un gran Mario como metrónomo, demostraron la versatilidad de la artista, pasando de lo onírico a lo crudo sin perder la esencia. Urgente, por su parte, sirvió de recordatorio de otro gran artista como es Depedro, que parecía acompañarnos desde las cuerdas vocales de un público que lo daba todo en un cierre de concierto falso. 


El primer bis llegó con "Eduardo", ese tema que es casi un relato corto en forma de canción. Una canción de desamor y amor, triste y alegre a la vez, precedida de una convocatoria de “Eduardos” por la sala. Es, sin duda, nuestra canción favorita y una maravilla de letra que nos evoca a finales míticos del cine, como "El Sexto Sentido" o "Cadena Perpetua", con un final explosivo, aunque un tanto anunciado. 

Y para despedirse, y ya que estábamos en modo cinematográfico, no podía faltar "Thelma y Louise", con su espíritu de libertad y su ritmo que invita al desenfreno. Dedicada a todas las mujeres y al empoderamiento femenino, el público, completamente entregado, acompañó con palmas y coreó hasta la última sílaba, despidiendo a la artista en un estallido de aplausos. 


Travis Birds no solo dio un concierto; creó una atmósfera donde la emoción y su pop rock latino se fundieron en una experiencia única, con un claro mensaje de mujer libre y actual. Su Jardín del deseo floreció con fuerza en Santiago de Compostela, dejando una huella imborrable en cada uno de nosotros y ayudándonos a forjar nuevas amistades, de esas que surgen en momentos mágicos y que están destinadas a permanecer en nuestros corazones para siempre.

Os dejamos con la galería de fotos del concierto: