PortAmérica anuncia su distribución por días

PortAmérica desvela por fin la distribución por días de su cartel y lo hace con una propuesta equilibrada y muy reconocible, combinando grandes nombres del pop estatal con nuevas voces y proyectos que representan bien el espíritu mestizo y abierto del festival.  El jueves arranca con una jornada pensada para conectar desde el primer momento con el público, encabezada por Rigoberta Bandini, uno de los fenómenos más singulares del pop español reciente. Su capacidad para mezclar ironía, mensaje generacional y estribillos coreables la ha convertido en una artista imprescindible en cualquier gran cita musical, y su directo es ya sinónimo de celebración colectiva. Junto a ella estarán The Rapants, que llegan con su pop fresco y actitud desprejuiciada, Niña Polaca, convertidos en una de las bandas más queridas del nuevo pop guitarrero estatal, Hey Kid, que aporta un sonido más introspectivo y emocional, y Marina Reche, una de las voces emergentes con mayor proyección, a la espera de que s...

Apagar el ruido: Luis Fercán convierte Vilanova en refugio

Hay conciertos que no necesitan artificios para volverse inolvidables. Basta una guitarra, una voz que parece hablarte al oído y un público dispuesto a escuchar sin prisa. Así fue la noche de Luis Fercán en A Cofradía Taberna Cultural de Vilanova de Arousa, donde presentó un formato completamente acústico y desnudo, solo ante una sala llena y en silencio. Una parada íntima dentro de su gira "Postales Perdidas", la misma que en noviembre lo llevó por México y Argentina y que, en Galicia, se integra en el Ciclo Momentos Alhambra, un programa que reivindica precisamente esto: la música en su estado más puro, sin interferencias, donde cada respiración forma parte de la canción.


El viaje comenzó con “Una Señal”, un arranque cálido que funcionó como introducción perfecta a la atmósfera que dominaría toda la noche. Sin abandonar ese tono confesional, enlazó con “Temple Bar” y “Dime Qué Hago”, dos de esas piezas que parecen dialogar directamente con el público.

La primera gran oleada emocional llegó con “Mesa para Dos”, y justo después apareció “Me Estoy Contradiciendo”, presentada como uno de los adelantos del próximo disco. En acústico cobró un matiz más vulnerable, casi como si Fercán la estuviera estrenando allí mismo. A partir de ahí, el concierto entró en su tramo más íntimo, con “Airecillo”, momento en el que el artista no pudo evitar sonreír, visiblemente emocionado, al escuchar al público corear cada verso, seguida de “Frío al Verte” y “Color Miel”, que él mismo definió como ese intento de bolero que casi se convierte en fado, interpretada con una delicadeza que terminó de silenciar la sala.



La segunda mitad del recital estuvo marcada por el equilibrio entre canciones ya consolidadas y material inédito. “Frexulfe” abrió el bloque de adelantos, dejando paso a “El Otro Lado”, otra de las piezas que formarán parte del nuevo trabajo. Entre ambas, Fercán regaló uno de los momentos más especiales de la noche con “Esta Vez”, que presentó como la canción con la letra que más le gusta del próximo álbum, una confesión que cobró aún más sentido en este formato desnudo, solo con guitarra y voz.

Tras “El Palmar”, uno de los puntos más emotivos del concierto, Fercán se detuvo a explicar por qué nunca hace bises. Recordó que cuando empezó a tocar, hace ya casi trece años —aunque todavía haya medios que lo sigan describiendo como emergente—, solía hacerlo en locales pequeños donde era imposible esconderse para volver a salir al escenario, una dinámica que siempre le pareció absurda y que le llevó a tomar una decisión que mantiene a día de hoy: no volver a hacerlo. Anunció entonces que quedaban tres canciones, y el murmullo recorrió la sala. Entre susurros, apuestas y cábalas compartidas, el público empezó a adivinar el final mientras los temas “ganadores” iban apareciendo uno tras otro.




Primero llegó “Cristales”, primer adelanto del ansiado quinto disco, tan coreada por el público que por momentos parecía que llevara toda la vida con nosotros. Le siguió “busco”, incluida en "Postales Perdidas" (2024), acogida como un regreso a territorio conocido. El cierre quedó reservado para “110”, una última sacudida emocional que la sala acompañó en absoluta comunión.

En un mundo de directos cada vez más ruidosos, luces, pantallas y artificios, Luis Fercán volvió a demostrar que hay otra manera de hacer las cosas: apagar el ruido, encender la palabra y dejar que la música respire. El Ciclo Momentos Alhambra encontró aquí una de sus noches más fieles a su espíritu. Y Vilanova, un concierto para guardar como quien guarda una carta: doblada con cuidado, lista para releerse cuando haga falta.

Os dejamos con la galería de fotos del concierto: